Golpe a golpe

Era su sueño no el mío, su sueño radicaba en un vacío errante: quería vivir un destino deseado a través de mi. No, fue una mal descifración de mis propias frases pasadas lo que le hacía creer que ese sueño debía ser mutuo y pertenecerme.

Yo solo quería ver mi nombre reflejado entre una inmensidad de seres con un par de comunes, y de paso atar el nombre del destino a mis tobillos, jugarle una mala pasada a lo que dicen que debe ser, escapar de lo ordinario y esperado.

Tal vez ya olvidé que alguna yo también desee un sueño (aunque fuese un sueño diferente a este).

Comentarios